sábado, 10 de marzo de 2012

ALBERTO BEST RAMOS EN EL RECUERDO GRAN PERIODISTA DEPORTIVO

SIEMPRE RECORDAMOS AL GRAN HOMBRE DE EL PERIODISMO PERUANO ''ALBERITA''
HOMENAJE A DON ALBERTO BEST QUE GRAN PERIODISTA Y MEJOR SER HUMANO...
Eran las 8 de la noche del miércoles del 2011. Eduardo Gamarra “Gamarrita” me llamó por teléfono para avisarme. “Mi sentido pésame, ha muerto tu viejo Alberto Best”, me dijo por el celular. La noticia me cayó como un baldazo de agua fría y desesperado corrí a mi auto rumbo a su casa. Subí raudamente las escaleras de su edificio donde vivía en Jesús María y su hijo Polito me abrió la puerta. Ahí lo vi que yacía en su sofá. Alberto Best se fue como se van los hombres buenos. Hacía un par de horas había fallecido. Solo atiné a abrazarlo y con lágrimas en los ojos lloré su muerte. Un día anterior habíamos estado juntos y siempre se despedía con una broma: “No voy a ir a ese almuerzo porque yo tengo casa, hermano”, decía siempre, lo que provocaba una sonrisa.
Al siguiente día lamenté mucho que algunos medios no le hayan dado ni siquiera unas líneas. Alberto Best fue un referente en el periodismo deportivo. 55 años de trayectoria impecable. Nunca le vi actitudes sospechosas. Era limpio, honesto, buen tipo. Vergonzoso para pedir favores. “Dile tú, a mí me da vergüenza”, decía cuando quería alguna chambita para algún conocido.
Yo lo conocí en 1978 cuando Perú fue a jugar un amistoso con Argentina en Buenos Aires. Lo había leído de niño en ese periódico tan popular como era “Última Hora”. Estaba con Óscar Vergara “Osver” quien había ido como enviado especial de La Tercera de La Crónica a cubrir ese partido. Lo invitamos a cenar y no quiso. “Me voy a mirar para adentro, gracias”, nos dijo, lo que nos hizo soltar una carcajada. En buen criollo, nos estaba diciendo me voy a dormir a mi hotel.
Ya cuando regresé a Lima en el ‘89, laboramos juntos en El Nacional, diario en el cual tenía su página AL TOQUE, que era muy leída por miles de lectores que eran sus hinchas. Le daba un toque de humor y sus jergas eran muy celebradas. Cuando surgió la idea de salir nuevamente “Última Hora” a circulación me pidió que lo acompañe. Él iba como jefe de Deportes. No acepté porque me sentía a gusto en El Nacional.
Ya en 1993 lo jalé a TODO SPORT. A Moisés Wolfenson siempre le cayó bien y lo quería mucho. Siempre lo elogiaba y un día que fue a una reunión al Círculo de Periodistas Deportivos, cuando lo iban a premiar, se dio cuenta de la dimensión del cariño que los colegas le profesaban. “El viejo vale oro, cómo lo quieren”, me dijo Moico susurrándome al oído. Hace un año dejó de existir, pero siempre recordamos, los que fuimos sus amigos como el “Chupo”, “Calila”, el “Pato” Quintana, Jorge Alva, Jorge García, Bernardo Salazar, Pedrito Orrego, Armando Leveau, Osquitar Becerra, Justo Linares, entre otros. Hoy se le hace una misa en la capilla de la iglesia San Antonio de Padua de Jesús María a las 8 de la noche. Sus hijos llegaron de Estados Unidos, donde residen. Yo estoy seguro que Dios lo tiene en el reino de los cielos. Cuando me entra la depre, pienso en él y lo rezo. Sé que me ayuda y alienta a seguir luchando en esta viña del Señor.
Gracias a Dios por haberme permitido conocer a un grande del periodismo deportivo nacional. en la reuniones del semanario al Toque. del Mencho Jimènez.Serehue.....unas de sus frases de ALBERITA .....que viva Barranca City....ah, mañana la Copa Perù a travès de www.radioimpactosatelital.com

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