sábado, 12 de marzo de 2016

Medardo Arce Burga , sigue grave en Hospital de Ciencias Neurologicas de Barrios Altos en Lima


CARTA DE SOBRINO DE MI AMIGO MEDARDO ARCE BURGA 
Recuerdo cuando era niño siempre tuve carencia de alguna cosa, quizás por que éramos 6 hermanos y el dinero no alcanzaba para complacernos a todos. Desde que tengo uso de razón siempre estuviste presente con alguna cosa para darme o algún grito para corregirme. Para ti siempre fue importante ayudar, a veces renegando porque sentías que eras el único, pero lo hacías. Hoy que soy adulto, sé que la familia es lo primero y mientras se pueda ayudar hay que hacerlo. Luego lo constate en la biblia, el libro al que muchos acudimos sólo cuando tenemos problemas. hay un versículo en proverbios que dice: no le digas a tu hermano cuando te pide ayuda, no tengo vuelve mañana, cuando tengas contigo para darle. Recuerdo que muchas veces me pediste dinero, y para mí mis ahorros son intocables como todos pensamos, pero siempre pensaba en todo lo que habías hecho por mí, que no podía negarme. Estas líneas no las escribo para que la gente empiece a depositar, sino que me llama la atención que desde que se abrió la cuenta haya cero soles, y hay mucha gente que se comprometió ayudar, y no lo ha hecho. Y para ti la palabra tenía mucho valor. La ayuda es hoy, no la próxima semana o el próximo mes cuando quizá ya no se pueda hacer nada y sólo quede lamentar. Nosotros, los familiares cercanos, estamos pendientes de ti, de los medicamentos, de tu evolución. Pero estamos gastando sólo en las medicinas que piden a diario, tu estado a veces empeora y se necesita especialistas que se tienen que traer para evaluarte y poder mantenerte estable, y eso se podría agilizar si se contará con más dinero a disposición. Estamos aferrados a la esperanza y a la fe, a eso que llaman milagro.
Todo esto lo digo de forma directa y frontal tal como tú eras, porqué para ti no habían medias tintas, las cosas siempre las decías como las sentías. De nada vale los lamentos, los " era tan bueno", si eso no se convierte en acción mientras se pueda, mientras haya posibilidad.
Eres mi tío favorito. Y eso no te lo ganaste con regalos, sino con tu forma de ser, tratando de ayudar a los demás, siendo un gran profesional, siendo un gran ser humano con defectos como todos. Yo estoy esperanzado en que puedas salir de esta horrible y dolorosa situación, pero también soy consciente de la realidad, de que esto pueda tener un triste desenlace porque tu estado es crítico. Pero la realidad es que se está haciendo todo lo posible, todo lo que esta a nuestro alcance, porque te queremos y queremos creer que saldrás victorioso de esta circunstancia...
Dios te bendiga enormemente tío Medardo.

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