ESTA COLUMNA SALDRÁ PUBLICADA EN AL TOQUE - Este Lunes 3 de noviembre
EN LA BOCA
DEL TUNEL
DEL TUNEL
Escribe: Fernando Jiménez
¡Soldaditos de Plomo!
La historia señala que casi todos los presidentes de la Federación Peruana de Fútbol fueron soldaditos de plomo de los gobiernos. Los ponían y los sacaban cuando se les daba real gana. Y los elegían de la manera más increíble posible. Todo era a dedo. No había elecciones y las asambleas de bases solo servían para otros fines. Y no solo en el Perú, sino en todo el continente. Hasta que FIFA dijo BASTA. Y en 1993 emitió una Resolución que los países afiliados adecuaran sus leyes en conjunto con los estatutos de sus federaciones.
Hagamos un recuento histórico de lo que sucedía en años anteriores. Voy a contarles todo desde que tengo uso de razón y lo que he vivido. En 1966 el presidente de la FPF era el Comandante (EP) Gustavo Escudero. El nos llevó a México 70 tras tener la suerte que emergieran jóvenes talentosos como Teófilo Cubillas, Roberto Chale, Hugo Sotil, Ramón Mifflin y Julio Baylón. Ellos se juntaron con los experimentados buenos jugadores como Perico León, Héctor Chumpitaz, Nicolás Fuentes, Pedro Gonzales, Orlando La Torre y Alberto Gallardo e hicieron una selección notable. Una de las mejores de toda la historia.
¿Por qué no siguió el Comandante Escudero si habíamos logrado el sétimo lugar en México 70?. A Papá Gobierno no le interesó y los reemplazó por Luciano Cuneo. No fuimos con su gestión a Alemania 74 y lo voltearon. En su lugar entró Miguel Pellny, con él ganamos la Copa América en 1975, pero tampoco siguió porque un año después lo reemplazó Álvaro Valdivia. No obstante, el contralmirante Augusto Gálvez Velarde, quien sucedió a Valdivia nos llevó a Argentina 78. Eran épocas de dictadura militar de Juan Velasco y Francisco Morales Bermúdez. Papá Gobierno movía a los presidentes como soldaditos de plomo.
En 1980 vuelve al poder el arquitecto Fernando Belaúnde Terry y en su periodo le dan la presidencia al ingeniero Alberto Espantoso Pérez. El nos llevó a España 82, pero no les habrá gustado la goleada que nos metió Polonia despidiéndose del mundial que lo cambiaron por el doctor Luis Vargas Horne, a quien también se lo tumbaron tras la condición de ir a un repechaje con Chile para México 86. Pusieron a Jorge Quiroz, quien abandonó a la selección a su suerte y solo cuando faltaban 10 días para jugar con Chile ordenó que la selección entrene. La consecuencia fue que Chile nos eliminó para ir al Mundial.
Alan García asumió en el ‘85 y a sugerencia de los hermanos Lucho y Bertha Gonzáles Posada nombraron a Oswaldo “Cachito” Ramírez, quien en su periodo votó por Nicolás Leoz dejando fuera del sillón de la Conmebol al doctor Lito Salinas. Fuera Cachito entró en su reemplazo Josué Grande Fernández, quien nombró una Comisión Italia 90 con el marino Carlos Castro Pareja quien se fue a Brasil a traer a Pepe. Esas eliminatorias no hicimos ni un punto.
Con la llegada de Alberto Fujimori al poder y como el “Chino” era analfabeto en el fútbol delegó funciones para que se nombre a un presidente y se metió a otro marino, el Contralmirante Walter Indacochea Queirolo. Fue cuestionado por vender los derechos de TV a TELEFE de Argentina y tras el escándalo tuvo que renunciar. Ahí entra en escena Manuel Burga, recomendado por el Ministro Pandolfi. Era su asesor legal. Gobernó seis meses, hizo un Plan Inca para conducir al fútbol peruano, pero también lo voltearon porque entró en su lugar Nicolás Delfino quien aprovechó que las elecciones debían ser con el voto de las BASES y ni corto ni perezoso resucitó la Copa Perú que la habían aniquilado 5 años. Desde 1988 a 1992. El resto de la historia ustedes ya la conocen. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. Moraleja: Papá Gobierno no te metas donde no sabes.
Hagamos un recuento histórico de lo que sucedía en años anteriores. Voy a contarles todo desde que tengo uso de razón y lo que he vivido. En 1966 el presidente de la FPF era el Comandante (EP) Gustavo Escudero. El nos llevó a México 70 tras tener la suerte que emergieran jóvenes talentosos como Teófilo Cubillas, Roberto Chale, Hugo Sotil, Ramón Mifflin y Julio Baylón. Ellos se juntaron con los experimentados buenos jugadores como Perico León, Héctor Chumpitaz, Nicolás Fuentes, Pedro Gonzales, Orlando La Torre y Alberto Gallardo e hicieron una selección notable. Una de las mejores de toda la historia.
¿Por qué no siguió el Comandante Escudero si habíamos logrado el sétimo lugar en México 70?. A Papá Gobierno no le interesó y los reemplazó por Luciano Cuneo. No fuimos con su gestión a Alemania 74 y lo voltearon. En su lugar entró Miguel Pellny, con él ganamos la Copa América en 1975, pero tampoco siguió porque un año después lo reemplazó Álvaro Valdivia. No obstante, el contralmirante Augusto Gálvez Velarde, quien sucedió a Valdivia nos llevó a Argentina 78. Eran épocas de dictadura militar de Juan Velasco y Francisco Morales Bermúdez. Papá Gobierno movía a los presidentes como soldaditos de plomo.
En 1980 vuelve al poder el arquitecto Fernando Belaúnde Terry y en su periodo le dan la presidencia al ingeniero Alberto Espantoso Pérez. El nos llevó a España 82, pero no les habrá gustado la goleada que nos metió Polonia despidiéndose del mundial que lo cambiaron por el doctor Luis Vargas Horne, a quien también se lo tumbaron tras la condición de ir a un repechaje con Chile para México 86. Pusieron a Jorge Quiroz, quien abandonó a la selección a su suerte y solo cuando faltaban 10 días para jugar con Chile ordenó que la selección entrene. La consecuencia fue que Chile nos eliminó para ir al Mundial.
Alan García asumió en el ‘85 y a sugerencia de los hermanos Lucho y Bertha Gonzáles Posada nombraron a Oswaldo “Cachito” Ramírez, quien en su periodo votó por Nicolás Leoz dejando fuera del sillón de la Conmebol al doctor Lito Salinas. Fuera Cachito entró en su reemplazo Josué Grande Fernández, quien nombró una Comisión Italia 90 con el marino Carlos Castro Pareja quien se fue a Brasil a traer a Pepe. Esas eliminatorias no hicimos ni un punto.
Con la llegada de Alberto Fujimori al poder y como el “Chino” era analfabeto en el fútbol delegó funciones para que se nombre a un presidente y se metió a otro marino, el Contralmirante Walter Indacochea Queirolo. Fue cuestionado por vender los derechos de TV a TELEFE de Argentina y tras el escándalo tuvo que renunciar. Ahí entra en escena Manuel Burga, recomendado por el Ministro Pandolfi. Era su asesor legal. Gobernó seis meses, hizo un Plan Inca para conducir al fútbol peruano, pero también lo voltearon porque entró en su lugar Nicolás Delfino quien aprovechó que las elecciones debían ser con el voto de las BASES y ni corto ni perezoso resucitó la Copa Perú que la habían aniquilado 5 años. Desde 1988 a 1992. El resto de la historia ustedes ya la conocen. Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. Moraleja: Papá Gobierno no te metas donde no sabes.
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